Ayer dió comienzo en el circuito barcelonés de Montmeló la 6ª edición española de la competición anual “Formula Student” en la que participan un total de 70 equipos procedentes de diversas universidades europeas.
La competición, que se desarrollará hasta el domingo, 30 de agosto, cuenta con el patrocinio oficial de Bosch. Adicionalmente, y con el objetivo de que los estudiantes puedan disfrutar de unos momentos de ocio y relajarse entre prueba y prueba, Bosch ha instalado una carpa en la ‘fan zone’ del circuito, donde los participantes podrán competir entre ellos jugando al ‘scalextric’ o comentar con sus equipos los pormenores de la competición.
Además de los equipos patrocinados por Bosch Alemania, en esta edición 2015 Bosch España ha ampliado su apoyo técnico y económico a tres de los 18 equipos españoles que participan en esta competición.
Se trata de los equipos universitarios ‘UPM Racing’ de la Universidad Politécnica de Madrid, que ya contaba con el apoyo de Bosch en anteriores ediciones y que se presenta este año con dos monoplazas, uno con motor de combustión y otro eléctrico; el ‘UVigo Motorsport’ de la Universidad de Vigo, que se presenta dentro de la categoría de combustión; y el ‘ETSEIB Motorsport’ de la Universidad Politécnica de Cataluña, que participa en la categoría de motores eléctricos.
La ‘Formula Student’ no la gana el equipo que presente sólo el coche más rápido de la carrera, sino el que muestra el mejor ‘concepto global’. A lo largo de todo un año escolar, los estudiantes planifican, diseñan y construyen ellos mismos sus monoplazas y, además, desarrollan un plan económico y un concepto de marketing que hagan viable el proyecto. Un panel de jueces procedentes de las áreas de ‘motor racing’, automoción e industria auxiliar evalúan los vehículos según un baremo establecido de ocho criterios, incluyendo los relativos a diseño, eficiencia, aceleración y consumo.
La ‘Formula Student’ reta a los miembros del equipo a ir un paso más allá en su formación, incorporando a ella la experiencia que aporta la construcción y fabricación del vehículo, así como la consideración de los aspectos económicos inherentes a la industria del automóvil. Los equipos deben planificar su trabajo como si se tratara de un fabricante que desarrolla un prototipo para ser evaluado de cara a su futura producción industrial. Por ello, el monoplaza debe mostrar, además de sus favorables características de conducción, tales como aceleración, frenado y manejabilidad, unos costes razonables de producción y una alta fiabilidad y seguridad.
La ‘Formula Student Spain’ (FSS), que comenzó hace ahora seis años, utiliza el mismo reglamento de la competición original de la ‘Formula SAE’, que realizó su primera competición en Estados Unidos en 1981. Una fórmula de éxito que se ha repetido en diferentes países, siendo las más destacadas dentro de Europa, las celebradas en Alemania (Hockenheimring), Gran Bretaña (Silverstone) y Barcelona (Montmeló).
Como en el resto de las competiciones de ‘Formula Student’, en la FSS los equipos participantes competirán entre sí en dos categorías de propulsor: combustión y eléctrico. Cada equipo ha trabajado durante todo el año en el diseño, construcción y puesta a punto de sus monoplazas para mostrar sus soluciones técnicas sobre la pista de carreras y experimentar por sí mismos el ambiente único de innovación, compromiso y diversión que caracterizan unas pruebas a las que acuden cada año los estudiantes más motivados y con más talento de todo el mundo.
Bosch es consciente de que ‘Formula Student’ constituye una importante cantera para la tecnología de la automoción, de ahí el apoyo del grupo a estas iniciativas, a través del soporte que reciben los estudiantes por parte de la compañía.
