La ciudad de Vitoria contará con 432 viviendas «inteligentes» en el barrio de Salburua

Se convertirá en un referente en construcción sostenible. El proyecto reducirá en un 40% sus necesidades de energía mediante la aplicación de tecnologías vanguardistas de almacenamiento de calor.

El consejero vasco de Vivienda, Iñaki Arriola, ha estado a cargo del comienzo de las obras de las viviendas que forman parte del el programa europeo Pime’s, junto con las ciudades de Sandness (Noruega) y Szentendre (Hungría). Todas ellas han sido elegidas por la puesta en funcionamiento de acciones ejemplares en materia de construcción sostenible en Europa.

Las viviendas sostenibles son  432 pisos, repartidos en cinco bloques, que serán construidos por Visesa, la empresa promotora de vivienda pública del Gobierno Vasco.

En este plan forman parte también como socios, el Ayuntamiento de Vitoria, la corporación tecnológica vasca Tecnalia, el Ente Vasco de la Energía (EVE) y Acciona.

Aislamiento y energías renovables

Según comunica Visesa, el objetivo es reducir hasta un 40% su demanda de energía con la colocación de sistemas de aislamiento en los tejados o ventanas.

Asimismo, las energías renovales tendrán un gran protagonismo, ya que cubrirán las necesidades energéticas de las viviendas, que cuentan con un el diseño bioclimático y sistemas de energía solar térmica.

Además,  uno de los inmuebles contará con aerogeneradores en la cubierta y su fachada sur estará cubierta de paneles solares para calentar el agua.

La peculiaridad de los paneles es que cuando la cantidad de sol haga posible que el calor se acumule, éste se almacenará en el suelo del edificio calentándolo alrededor de un grado, por lo que las necesidades energéticas para el invierno serán aún menores.

Se trata de una iniciativa proyecto que forma parte del programa Concierto de la UE cuyo objetivo es el desarrollo de comunidades eficientes desde el punto de vista energético con el que se espera obtener una reducción del 48 por ciento del consumo de energía y la emisión de 640 toneladas menos de CO2 a la atmósfera.