El conocido experto en políticas energéticas, Javier García Breva, ha asegurado que nuestro país podría beneficiarse de 4.000 millones de euros para financiar diversos proyectos de eficiencia energética hasta este año. Todo ello, a través de los fondos FEDER y otras convocatorias de energía inteligente como Horizon2020.
Breva indica que, en la actualidad «es de especial relevancia para España esta inversión porque se traduciría en 3.000 millones de euros para proyectos de eficiencia energética con los FEDER, más los 800 millones de los programas de energía inteligente, Horizon2020».
Cabe recordar que la Unión Europea ha fijado como prioritario todo lo relacionado con la eficiencia energética hasta el año 2020. De hecho, ha puesto como ejemplo de buenas prácticas a países como Francia y Alemania.
En el primer caso, Francia destaca por las acciones de rehabilitación energética de edificios de protección oficial a través de los fondos FEDER. En Alemania, por sus esfuerzos en eficiencia energética en edificios públicos por contratos de rendimiento.
Precisamente, esta medida alemana se incluye en la Ley 8/2013 por la cual los proyectos de eficiencia energética deberían financiarse con los propios ahorros que se van a producir en el recibo de la luz en los edificios donde se van a producir.
En nuestro país las cosas son diferentes. Los edificios en España aún tienen grandes deficiencias en materia de eficiencia energética. Sólo un escaso 5 % de ellos cumplen con los requisitos mínimos en esta materia, aunque «la lectura positiva» es que en los presupuestos europeos para 2020 se establece el 20 % de FEDER para financiar estos proyectos.
Relacionado con este asunto, hay que destacar que el Ministerio de Fomento ha actualizado el código técnico de la edificación para imponer la letra B como la calificación mínima exigible en los edificios. Un cambio que puede significar, por ejemplo, que, al pasar de letra F a la B habría un ahorro energético del 60 % de la energía.
Este hecho puede mejorar la situación del sector de los servicios energéticos que incluso podría «triplicar su facturación si cumple con los objetivos de reducción de energía del 20 % para el año 2020», según indica García Breva.
Por otra parte, el Manager de Financiación de la Innovación de Alma CG, Ramón Lubián, ha indicado que no hay que olvidar que, a parte de la edificación, también las empresas y la industria puede beneficiarse de estas ayudas europeas «debería saber que cuando llevan a cabo actuaciones de eficiencia energética pueden tener acceso a una serie de beneficios fiscales».
En este sentido, remarca que las inversión en esta materia pueden dar lugar a deducciones fiscales en el impuesto de sociedades, ya que contribuyen a una reducción de gases de efecto invernadero.
Un ejemplo, según Lubián, está en las industrias que tengan elevados consumos de gas natural e impulsen proyectos de ahorro energético como el cambio de una caldera por otra más eficiente les puede reportar una deducción del 8 %».
Exieten, además, otro tipo de subvenciones como el fondo Jessica del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) para prestar hasta el 100 % de una inversión de eficiencia energética a un tipo de interés «mucho más bajo que el del mercado», ha explicado Lubián.
Además, por Comunidades Autónomas, también se puede encontrar financiación de hasta un 20 %, que suele ser a fondo perdido, a través de los distintos institutos de la energía. Tal es el caso de Galicia, La Rioja, País Vasco, Andalucía, Castilla La Mancha, Extremadura y Comunidad Valencia.