Entre los gigantes de la tecnología de la iluminación, el nombre ROBLAN puede sonar un poco más modesto, pero empresas como esta suelen marcar la pauta en el sector.
Mientras algunos experimentan con las formas, ROBLAN se centra en algo esencial y sencillo: luz donde se necesita y solo cuando se necesita. En la feria Light+Building de 2018, mostraron cómo lo consiguen en su nueva línea de alumbrado público, fabricada íntegramente en España.
«Made in Spain»
El eslogan de la línea, «Hecho a medida. Hecho en España», refleja la geografía y la filosofía. Todas las luminarias se montan en el país de origen de la empresa y, lo que es más importante, se adaptan a las necesidades específicas de una ciudad o calle en particular.
ROBLAN ofrece dos enfoques: la modernización de las farolas existentes y las luminarias a medida.
Si ya tiene farolas instaladas (y sustituir todo el sistema es caro y lleva mucho tiempo), la empresa ofrece componentes LED modulares. Estas unidades pueden integrarse en cualquier carcasa, desde antiguos arcos metálicos hasta soluciones más modernas. Este es uno de esos raros casos en los que la tecnología no destruye el pasado, sino que ayuda a mejorarlo.
Y esto no supone ningún compromiso en cuanto a la calidad. Los módulos están fabricados con materiales de alta calidad, entre los que se incluyen:
- Protección contra sobretensiones de hasta 15 kV, esencial para el funcionamiento en todas las condiciones climáticas.
- Tratamiento anticorrosión, adecuado incluso para climas marinos.
- Los chips CREE proporcionan una potencia luminosa de hasta 130 lm/W, lo que facilita la sustitución de las lámparas de sodio obsoletas y reduce el consumo energético en casi un 63 %.
Parece un ahorro. Pero la funcionalidad también es de primera categoría. Los módulos están equipados con controladores Inventronics, disponibles en varias versiones: desde la versión básica con ajuste de 1-10 V y compatibilidad con DALI hasta una versión programable con hasta 6 niveles de encendido. Esto ya resulta interesante para las ciudades inteligentes, ya que el programa de funcionamiento puede adaptarse al tráfico real: cuando no hay nadie en la calle, la luz se atenúa; durante las horas punta, funciona a máxima capacidad. Ahorro y cuidado de los residentes.
Luminarias que no deslumbran
Si la modernización no es una opción, ROBLAN ofrece una gama de nuevas luminarias. Se trata de sistemas ópticos completos con una distribución precisa de la luz.
Utilizan unidades ópticas de la empresa finlandesa LEDiL, que literalmente «dibujan» la luz sobre la carretera, evitando las fachadas de los edificios y las ventanas de los apartamentos. Se trata de contaminación lumínica, confort, seguridad y privacidad.
Para garantizar la durabilidad de estas ópticas, una junta de silicona proporciona protección IP67 directamente a nivel de la lente. Esto significa que el polvo, el agua, la lluvia y la niebla permanecen fuera.
Cuatro modelos, cuatro escenarios
La empresa ofrece luminarias prefabricadas con módulos integrados para aquellos que no desean montar una solución a partir de componentes individuales. Solo hay cuatro modelos, pero cubren casi todas las aplicaciones en exteriores:
- GALAXYGO
- STRELAGO
- COMETGO
- FERGO
Cada uno está disponible en potencias de 20 a 50 W, con una temperatura de color de 3000 K, 4000 K o 6000 K. También se puede elegir el tipo de controlador: básico, ajustable (1-10 V) o programable. Esto permite adaptar la iluminación al entorno local, ya sea un callejón tranquilo o un cruce concurrido.
El resultado es un elemento más de la infraestructura urbana: seguro, eficiente y energéticamente eficiente. Y gracias a su configuración flexible, se reducen las emisiones de carbono, algo esencial para cualquier ciudad que apueste por el desarrollo sostenible.
Conclusión
¿Qué obtenemos? ROBLAN demuestra que el alumbrado público actual es un sistema sofisticado que combina ingeniería, programabilidad y un enfoque respetuoso con el medio ambiente. Módulos flexibles para quienes desean actualizar su antiguo sistema. Soluciones listas para usar para quienes están construyendo desde cero. Y el resultado general son calles bien iluminadas, sin deslumbramientos y tranquilas.
Mientras algunos todavía hablan de «ciudades inteligentes», otros ya han puesto los primeros puntos en el mapa. Y esos puntos están iluminados por LED.