La firma vizcaína Klap acaba ser respaldada internacionalmente al obtener la Mención Especial en los Premios Green Dot, una de las referencias internacionales más importantes en el campo de la sostenibilidad y el medio ambiente. El proyecto galardonado es un sistema protegido y cubierto de aparcamiento de bicicletas cuyas primeras instalaciones se comenzarán a instalar este próximo otoño en el municipio vizcaíno de Getxo.
La sexta edición de los Green Dot Awards –uno de los galardones con mayor reconocimiento internacional en el campo de la excelencia en productos o servicios ambientalmente sostenibles– cuenta entre los galardonados de este año con una pequeña empresa vasca, Klap, dedicada al diseño industrial y la generación de ideas de valor añadido en el campo medioambiental.
Esta firma de Amorebieta (Bizkaia) competía en los premios fallados recientemente en Estados Unidos en la categoría de ‘Concepto’ en la que participaban más de 500 proyectos de 25 países. Aunque Klap no se ha llevado el principal galardón, sí ha obtenido la única Mención Especial del jurado por presentar uno de los proyectos “más innovadores” e interesantes del concurso desde el punto de vista de negocio y de planteamiento medioambiental”.
El proyecto, denominado ‘Aparka’, es un sencillo pero muy innovador sistema de aparcamiento de bicicletas. De hecho, para los miembros del jurado, “la iniciativa de Klap va a fomentar el uso de este
medio de transporte en las ciudades al mejorar las condiciones de aparcamiento y evitar, al mismo tiempo, la congestión de tráfico causado por los vehículos a motor”.
Las claves determinantes para premiar este proyecto hacen referencia a la seguridad del sistema contra el riesgo de robo o vandalismo, el mínimo espacio de suelo público que ocupa, o bien la facilidad para su instalación en cualquier lugar a pie de calle.De igual modo,el jurado alaba su barata fabricación y fácil mantenimiento, así como la conectividad e inteligencia del sistema ideado.
El proyecto Aparka, ideado totalmente en Euskadi, se puso en marcha en 2012 con la creación por parte de Klap del diseño conceptual y de ingeniería de desarrollo de la instalación. Posteriormente se procedió a la generación de un prototipo.
Esta instalación provisional -actualmente en fase de prueba en el campus de la Universidad Pública Vasca UPV-EHU de Leioa (Bizkaia) con una muy positiva aceptación por parte de los usuarios-, ha permitido evaluar y testar el producto de cara a su próxima comercialización. De hecho, la idea es comenzar su fase de explotación este mismo otoño en el municipio vizcaíno de Getxo.
11 bicis en la plaza de un coche
El jurado de los Green Dot Awards ha valorado las características técnicas que presenta este sistema sostenible que permite aparcar hasta once bicicletas en el mismo espacio que el ocupado por un coche de tamaño medio (5×2 metros), aunque su diseño modular permite otras configuración en función de la demanda de sus clientes.
El diseño del producto ha tratado de minimizar el número de componentes utilizados, con un ensamblaje muy sencillo que permite industrializar el sistema. Se trata de módulos fabricados en materiales muy resistentes (acero tubular reutilizado curvado, fácil de transportar, almacenar y montar).
En dichos módulos, los usuarios abren un pequeño habitáculo en el que deja aparcada su bicicleta y que es abierta o cerrado con una tarjeta de radiofrecuencia (RFID) a disposición del usuario y que hace contacto con una etiqueta-sensor identificativa que se coloca en la rueda trasera de la bici. Los datos del usuario quedan registrados en el sistema, que se puede utilizar también con smartphones.
De esta manera la bicicleta queda anclada y protegida evitándose robos o el vandalismo, así como las inclemencias del tiempo. El módulo cuenta además, con una pequeña consigna para dejar el casco o el equipo personal, con el fin de fomentar su uso diario.
En el diseño de Aparka, es una iniciativa del Centro de Innovación CEDEMOS, especializado en Movilidad Sostenible e Innovación Social, la organización Emaús SCIS, el Ayuntamiento de Getxo, así como la Obra Social de la BBK, que ha apoyado económica el desarrollo del proyecto al estar incluido en la red de innovación social BBK Innova Sarea en su vertiente de medio ambiente.
De igual modo, en la fabricación de los módulos de Aparka se encargarán pymes vizcaínas, mientras que de su montaje se encargarán personas en riesgo de exclusión social contratadas por Emaús SCIS.