La Junta de Gobierno ha aprobado el Proyecto definitivo de la Ordenanza de las Bases Reguladoras de la Concesión de Subvenciones para la Conservación y Rehabilitación de Viviendas y Edificios Residenciales.
Unifica así la normativa, actualmente dispersa, facilitando la tramitación a los propietarios de viviendas y edificios que acometan obras de rehabilitación dentro de cualquiera de los programas municipales existentes. La nueva normativa optimiza los recursos humanos y las vías de comunicación con los ciudadanos, y establece nuevas líneas para la rehabilitación de edificios, incrementando su sostenibilidad.
La Ordenanza, que supone una importante modernización del ordenamiento municipal, recoge las líneas que establece la Ordenanza de Conservación, Rehabilitación y Estado Ruinoso de las Edificaciones, OCRERE, que entró en vigor en diciembre de 2011. La OCRERE establece diferencias entre la rehabilitación y la conservación, por lo que era necesario adaptar la tramitación de subvenciones de los distintos programas existentes.
En este sentido, el proyecto de Ordenanza aprobado hoy, marca dos líneas de ayudas: las subvenciones para el fomento de actuaciones de conservación y las destinadas al fomento de las actuaciones de rehabilitación.
Actuaciones de conservación
En la modalidad de subvenciones para el fomento de actuaciones de conservación están incluidas obras derivadas de una Inspección Técnica de Edificios, ITE, de resultado desfavorable. La nueva normativa amplía estas ayudas a las obras realizadas en edificios que no tengan ITE desfavorable, si se incorporan a la intervención criterios de sostenibilidad que permitan reducir el consumo energético del edificio, como por ejemplo incrementando o mejorando el aislamiento térmico de las fachadas y de las cubiertas colocando nuevos paneles aislantes, o sustituyendo las carpinterías existentes por otras que reduzcan las pérdidas de calor y frío.
Además, incluye las actuaciones derivadas de una situación de ruina urbanística en los supuestos que establece la OCRERE, como consecuencia de siniestros, patologías u otras circunstancias sobrevenidas e imprevistas.
Actuaciones de rehabilitación
En cuanto a las subvenciones para el fomento de actuaciones de rehabilitación, incluye las actuaciones que contribuyan a mejorar las condiciones de adecuación estructural y funcional de los edificios y de habitabilidad de las viviendas, tales como las relacionadas con la seguridad de utilización, gestión de residuos y calidad del aire interior, aislamiento acústico, rendimiento de las instalaciones térmicas, eficiencia energética de la iluminación, eficiencia en el uso del agua y la contribución solar.
La Ordenanza también extiende a los edificios de todo el término municipal las actuaciones para la mejora de la sostenibilidad y eficiencia energética de las edificaciones, así como las derivadas del cumplimiento de una orden de ejecución de obras de rehabilitación en edificios catalogados con los niveles 1 ó 2 de protección por el Plan General de Ordenación Urbana de Madrid que se encuentren en situación legal de ruina.
Mayor agilidad e información
La nueva normativa agiliza los procedimientos de concesión de subvenciones al unificar y reducir a un único procedimiento los actualmente regulados por normativa dispersa y de orígenes diversos (normativa municipal, convenios de rehabilitación suscritos con otras administraciones, etc)
Esta unificación, además de facilitar la tramitación a los propietarios de viviendas y edificios que acometan actuaciones de conservación y rehabilitación en el marco de los programas municipales, optimizará los recursos humanos al integrar equipos multidisplinares, especializados en distintos tipos de subvenciones, que van a seguir un procedimiento único que mejorará la calidad del servicio.
Balance gestión de ayudas
El Ayuntamiento de Madrid ha gestionado la concesión de ayudas a la rehabilitación dentro de los diferentes programas municipales, lo que ha permitido, desde 2003, llevar a cabo 97.760 actuaciones de conservación y rehabilitación. Del total, 13.271 corresponden a las Áreas de Rehabilitación Integrales; 83.659 a las obras derivadas de un informe negativo de la ITE; y 830 a la rehabilitación sostenible. En total, se han concedido ayudas por importe de 83,1 millones, de los cuales, 49,3 se han invertido dentro de las Áreas de Rehabilitación Integrales; 32,1 millones en la ITE; y 1,7 millones en la línea de rehabilitación sostenible.
El Gobierno de la ciudad mantiene este esfuerzo inversor convencido de que la rehabilitación tiene importantes efectos sociales y económicos. Por un lado, contribuye a mejorar la habitabilidad, accesibilidad y sostenibilidad del patrimonio edificado, e incrementa por tanto la calidad de vida de los vecinos. Y por otro, las subvenciones públicas dinamizan la inversión privada y promueven la generación de empleo en un sector muy afectado por la crisis, como es el de la construcción, que ha encontrado en las actuaciones rehabilitadoras un importante foco de actividad.