Las comunidades solares permitirán a más de 1.100 familias beneficiarse de una reducción en el consumo del 40% y acceder al autoconsumo renovable sin realizar inversiones.
El Arzobispado de Madrid e Iberdrola desarrollarán trece comunidades solares en diferentes ubicaciones de la Comunidad de Madrid; que van a permitir a más de 1.100 familias reducir su consumo hasta un 40% y acceder al autoconsumo renovable; sin necesidad de contar con una instalación propia ni de realizar ningún tipo de inversión.
Esta modalidad de autoconsumo comunitario permite a los usuarios acceder a la energía 100% renovable generada desde las cubiertas de trece parroquias; en las que se van a instalar más de 1700 paneles con una potencia conjunta superior a los 800 kilovatios (kW); suficiente para producir anualmente más de 1.000 MWh. Estas instalaciones fotovoltaicas evitarán la emisión de más de 5.800 toneladas de CO2 a la atmósfera en los próximos 30 años.
Gracias a las trece comunidades Solares, más de 1.100 familias, que estén en un entorno de aproximadamente dos kilómetros de alguna de las trece ubicaciones, podrán suscribirse; y ahorrar en sus facturas de la luz al consumir localmente parte de la energía renovable producida por esta instalación.
Los usuarios pueden calcular el ahorro económico y ambiental y unirse a la comunidad solar a través de Comunidades solares – IBERDROLA.
Impulso al autoconsumo
Las soluciones de autoconsumo colectivo desarrolladas han permitido poner el autoconsumo a disposición de cualquier cliente, tenga o no cubierta propia; ya que actualmente en España más de dos tercios de la población vive en edificios en altura. Los clientes de este segmento cuentan con el Plan Solar, una tarifa de electricidad competitiva en las horas en que no hay sol; que es cuando necesita consumir energía de la red, ya que durante el día se autoabastece desde su propia instalación.
Los sistemas solares de autoconsumo pueden suponer un ahorro medio en la factura anual del 30% en el caso de comunidades de vecinos; un 50% para empresa y negocios; y de un 70% en viviendas unifamiliares. Este ahorro se produce por una triple vía: la energía producida por la instalación que el usuario no tiene que comprar; la compensación por los excedentes de energía no consumida, que es vertida a la red, y el ahorro por menores impuestos.
En cuanto a la posibilidad de compensar la energía vertida a la red, los clientes de Iberdrola no cuentan con ningún tipo de suelo para su valoración; de forma que su factura puede llegar a ser de cero euros. Además, cuenta con el servicio Solar Cloud, que permite en el caso de que aún queden excedentes derivarlos para el consumo en otra residencia.